Partimos de Somaén,un bonito pueblo soriano,que ya hemos mencionado antes en éste Blog.Se llega a él abandonando la Autovía A2 en Arcos de Jalón ó Medinaceli y tomando la antigua carretera N-II que recorre la hoz del rio Jalón.
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Ya en Somaén ascendemos por sus callejas hasta la Iglesia y continuamos desde allí hasta alcanzar la via del tren.Antes de cruzarla un indicador nos dice que tenemos por delante 3,6 km hasta llegar al despoblado de Avenales,final del desfiladero y de nuestro trayecto de ida.
En ésta panorámica del pueblo tomada desde el puente sobre el Jalón vemos el risco desde el que da inicio el desfiladero.
En ésta panorámica del pueblo tomada desde el puente sobre el Jalón vemos el risco desde el que da inicio el desfiladero.
Tras cruzar la via seguimos un amplio camino .A nuestra izquierda vermos vestigios de las antiguas huertas de Somaén,hoy abandonadas,con excepción de un delicioso rincón,envidia del hortelano aficionado que soy.
En ésta primera parte del camino encontraremos algunas higueras y abundancia de arbustos con moras que están en sazón en éste final de Septiembre.Aprovechando una botella de agua y una bolsa que llevaba en mi mochila recolecté un kilo de ésta frambuesa negra para hacer una confitura.
Tras una hora de camino atisbamos los primeros restos de Avenales...
La naturaleza se va adueñando poco a poco del lugar,si bien las antiguas calles están bien cuidadas.La intervención de alguien ha segado la hierba y las ha dejado transitables.
La vida sin duda resultaba dura aquí en los rigurosos inviernos...
A la salida del caserío,siguiendo el camino que nos llevaría a Velilla de Medinaceli,una Fuente calmará nuestra sed.
Sólo una casa se mantiene en pie,aunque no había rastro de sus moradores.
Tras pasar un rato muy agradable abandonamos Avenales y tomamos el camino de retorno.