Albeta
Arribé el Lunes 28, ya en noche cerrada, al ignoto hasta el momento Área de Autocaravanas. Resultó ser éste una agradable sorpresa. Limpio, con plazas bien marcadas y amplias, tomas de electricidad (de pago, obviamente) y vallado en todo su perímetro. Una autocaravana británica estaba ya anclada en una de las plazas con toma de electricidad por lo que me situé en el lugar más alejado.
Permanecí todo el Martes, noche incluída. Lectura, paseos , cocina ...es muy poco lo que necesito para sentirme bien.
Tarazona
El Miércoles por la mañana,dejé Albeta bajo una fina lluvia que mutó en aguacero cuando alcancé la cercana Borja para avituallarme en el Dia.
Una particularidad del establecimiento es que, al margen de sus habituales productos, tiene una zona en la que se ofrecen productos de la comarca. Me hice con un tarro de miel y una lata de espárragos, ambos con un precio muy razonable.
Siempre bajo el diluvio, llegué a Tarazona.
Estacioné en el amplio aparcamiento libre junto a la carretera y como fuese que la lluvía persistía, aunque atenuada su intensidad, y no hacía apetecible el paseo, dediqué unas horas a la lectura.
En éste viaje he centrado mi interés en un nuevo libro de Frederick Forsythe, "El manipulador".
Por cierto, algún día explicaré de que manera me estoy haciendo últimamente con muchos excelentes libros, de manera totalmente gratuíta ( y lícita, por descontado).
Después de disfrutar con "Chacal" y "El cuarto protocolo" , con éste se repite la buena experiencia. A veces de desdeña a los autores de "best sellers" por considerarlos creadores menores, pero en éste caso las tramas y la narración apremian a progresar ávidamente en la lectura.
A media mañana dejó de caer agua y tras calzarme las botas y tomar la mochila salí a recorrer la ciudad. Me llamó la atención un pasquín que daba aviso de una visita guíada para el Viernes 1 de Noviembre.